Glosario Clínica Albareda

Lumbalgia

La lumbalgia, o dolor en la zona baja de la espalda, es una de las afecciones musculoesqueléticas más comunes que puede afectar a cualquier persona en algún momento de su vida. Descubre qué la causa, cómo reconocerla a tiempo, las opciones de tratamiento recomendadas y qué puedes esperar para recuperar tu bienestar y movilidad.

¿Qué es la lumbalgia?

La lumbalgia, o dolor lumbar, es el malestar que se sitúa en la parte baja de la espalda, entre la última costilla y la región glútea. Imagina la columna lumbar como el pilar de un puente: si uno de sus pilares se resiente, toda la estructura acusa la presión. La lumbalgia es una de las consultas más frecuentes en traumatología porque limita tu movilidad, dificulta el descanso y puede afectar a tu día a día.

¿Quién puede desarrollarla y por qué?

Factores no controlables

  • Edad: aumenta tras los 40 años debido al desgaste natural de discos y articulaciones.
  • Antecedentes familiares: predisposición genética a problemas de disco o articulaciones vertebrales.
  • Anatomía individual: variaciones óseas o curvaturas que sobrecargan la zona lumbar.

Factores controlables

  • Sedentarismo: la falta de tono en los músculos del “core” no sostiene bien la columna.
  • Obesidad: el exceso de peso presiona discos y articulaciones vertebrales.
  • Gestos inadecuados: levantar cargas con la espalda curvada o permanecer sentado muchas horas.
  • Tabaquismo: reduce la oxigenación de los discos intervertebrales y acelera su degeneración.

¿Cómo se manifiesta?

El dolor lumbar puede presentarse de varias formas:

  • Agudo: aparece de forma súbita tras un esfuerzo y suele acompañarse de espasmo muscular intenso.
  • Subagudo: dura varias semanas y fluctúa en intensidad.
  • Crónico: persiste más de tres meses, con episodios de empeoramiento y alivio.

Signos de alarma que requieren consulta urgente

  • Dolor muy intenso que no cede con reposo ni analgésicos habituales
  • Pérdida de fuerza o sensibilidad en las piernas
  • Cambios en el control de esfínteres o dificultad para orinar
  • Fiebre, escalofríos o pérdida de peso inexplicada asociada al dolor

¿Cómo se diagnostica la lumbalgia?

Empezamos con una anamnesis detallada para saber cuándo apareció el dolor, cómo evoluciona y qué lo desencadena. En la exploración física valoramos tu postura, la movilidad lumbar, la tensión muscular y realizamos maniobras neurológicas básicas para evaluar reflejos, fuerza y sensibilidad.

Las pruebas complementarias se piden según los hallazgos:

  • Radiografía de columna lumbar: descarta fracturas, espondilolistesis o alteraciones óseas.
  • Resonancia magnética: se usa si hay signos neurológicos (ciática intensa, déficit motor) o dolor crónico que no responde al tratamiento básico.
  • Análisis de sangre: si sospechamos de infección o enfermedad inflamatoria sistémica.

¿Qué opciones de tratamiento existen?

El objetivo es aliviar el dolor, restaurar tu función y prevenir recaídas. Cada tratamiento se elige según la intensidad, duración y factores personales.

¿Cuándo indicamos reposo activo y analgésicos?

Se recomienda evitar el reposo absoluto y fomentar el movimiento suave. Los analgésicos y antiinflamatorios no esteroideos (ibuprofeno, naproxeno, paracetamol) ayudan a controlar el dolor y la inflamación en fases agudas.

  • Duración típica: 5-10 días
  • Contraindicaciones/efectos secundarios: puede irritar estómago, afectar riñones o incrementar la tensión arterial

¿Cómo ayuda la fisioterapia?

La fisioterapia fortalece el “core” y mejora la flexibilidad lumbar. Incluye ejercicios de estabilización, estiramientos, terapia manual y electroterapia (TENS, ultrasonidos).

  • Duración típica: 6-8 semanas, 2–3 sesiones semanales de 45 minutos
  • Contraindicaciones: precaución con hernias sintomáticas o dolor neuropático intenso

¿Valoramos las infiltraciones?

Se reservan a dolor lumbar con componente radicular o inflamatorio persistente. Se inyectan corticoides o anestésico local en espacio epidural, facetario o sacroilíaco, guiadas por imagen.

  • Duración del efecto: semanas a meses, máximo 3 infiltraciones al año
  • Contraindicaciones/efectos secundarios: infección local, atrofia cutánea, subida transitoria de glucosa

¿Qué aporta la medicina regenerativa?

En la Clínica Albareda Traumatología Avanzada utilizamos plasma rico en plaquetas (PRP) para estimular la reparación de tejidos lumbares.

  • Protocolo: 1–3 sesiones con intervalos de 4–6 semanas
  • Duración del efecto: meses
  • Contraindicaciones/efectos secundarios: molestias leves en el punto de infiltración, riesgo mínimo de infección

La combinación de estos tratamientos permite adaptar tu plan: fases agudas con analgesia y reposo activo, transición a fisioterapia, y en casos persistentes, infiltraciones o PRP. Sin embargo, siempre se valorará en consulta el tratamiento más eficiente.

¿Qué puedes esperar?

La lumbalgia aguda suele mejorar en 4–6 semanas con tratamiento conservador, recuperando tu funcionalidad. El pronóstico es excelente si se diagnostica a tiempo, sigues las indicaciones y corriges posturas y hábitos de vida.

En lumbalgia crónica, el ejercicio regular, el control de peso y la ergonomía reducen un 50% el riesgo de episodios repetidos y mejoran tu calidad de vida. Por el contrario, el sedentarismo y las posturas mantenidas pueden perpetuar el dolor y aumentar las recaídas.

Datos clave importantes

  • Frecuencia: el 60–80% de la población sufrirá lumbalgia en algún momento de su vida.
  • Recuperación aguda: más del 90% de los episodios mejora en 4–6 semanas con tratamiento adecuado.
  • Prevención de cronicidad: fortalecer el “core” y corregir la postura reduce un 50% el riesgo de dolor crónico.
  • Eficacia de PRP: estudios iniciales muestran alivio en el 70% de los pacientes con dolor lumbar crónico tras infiltraciones de PRP.

¿Cómo se soluciona?

Aquí puedes ver los servicios que te pueden ayudar.

Traumatología

El traumatólogo puede adivinar las causas y trazar un plan rápido para eliminar tu dolor

Fisioterapia

La fisioterapia es un gran aliado para curar y prevenir la lumbalgia

jugador de golf de avanzada edad que puede jugar porque es paciente de la clinica albareda

Quienes somos

Somos tu centro de traumatología en Barcelona

Ayudamos a personas activas a recuperar y mantener su dinamismo, o mejorar su calidad de vida.

Desde la profesionalidad, la confianza y la pasión por nuestra labor, te ayudamos a superar tu lesión osteoarticular. Sabemos que si recuperas el movimiento, la agilidad y el dinamismo, serás más feliz. Unimos talento, vocación y trabajo en equipo para ayudarte a conseguir tus objetivos.